En aProperties seguimos muy de cerca la evolución del mercado financiero, ya que los movimientos del Banco Central Europeo (BCE) tienen un impacto directo en el comportamiento de la vivienda y en las decisiones de compra de nuestros clientes.
El pasado 30 de octubre, el BCE decidió mantener los tipos de interés en el 2 %, lo que supone la tercera reunión consecutiva sin cambios en el precio del dinero. Con esta medida, la institución europea confirma que considera adecuada su actual política monetaria, apostando por la estabilidad frente a nuevos ajustes.
Una señal de moderación en el mercado hipotecario
Desde nuestro punto de vista, esta decisión marca un punto de inflexión: el fin del ciclo de euforia hipotecaria que hemos vivido en los últimos años. Después de una etapa de fuerte dinamismo, con tipos históricamente bajos y un notable incremento de la concesión de hipotecas, el mercado comienza a normalizarse.
Los expertos prevén que el Euríbor —índice de referencia de la mayoría de las hipotecas variables— se mantenga en torno al 2 %–2,2 % en los próximos meses. Esto implica una estabilización de las cuotas hipotecarias y menos incentivos para nuevas contrataciones, especialmente entre los perfiles más sensibles a los cambios de tipos.
Más selectividad y un nuevo equilibrio
Observamos también que las entidades financieras están endureciendo sus criterios de concesión de crédito, lo que apunta a un mercado más selectivo y equilibrado. Esta tendencia favorece la solidez del sistema y promueve decisiones de compra más sostenibles y meditadas.
En el caso del mercado residencial, esta moderación no se traduce en una pérdida de interés. En aProperties seguimos registrando una demanda sólida en ubicaciones prime como Barcelona, Madrid, Baleares o la Costa Brava, donde el comprador —nacional e internacional— busca principalmente calidad, ubicación y valor a largo plazo.
2026: un año de consolidación
Mirando hacia 2026, esperamos un año de consolidación. Los tipos de interés estables favorecerán un entorno más predecible para compradores e inversores, con operaciones más racionales y orientadas al valor real de los activos.
Esta etapa de mayor equilibrio es una oportunidad para todos los actores del sector: compradores, inversores y agentes. Un mercado más pausado y estable permite tomar decisiones con visión estratégica y a largo plazo, algo que encaja plenamente con nuestra filosofía de ofrecer un asesoramiento personalizado, riguroso y transparente.
Creemos que el fin del boom hipotecario no debe interpretarse como una desaceleración, sino como una maduración del mercado inmobiliario. La estabilidad financiera ofrece un terreno fértil para seguir construyendo relaciones de confianza y ayudar a nuestros clientes a encontrar el hogar o la inversión que mejor se adapte a sus objetivos.




